Por primera vez en la historia de la Iglesia de Dios en Bolivia, un grupo grande de hermanos se reunieron en el lugar que Dios escogió para poner su nombre, para compartir y regocijarse ante Él en paz, armonía y unidad.
El 28 de septiembre, 65 hermanos tanto locales como visitantes llegaron al salón que se arrendó en La Paz, sede del gobierno boliviano, para guardar el día Sábado antes de la Fiesta, donde el Dr. Ralph Levy, ministro de la Iglesia de Dios, una Asociación Mundial y Académico del Instituto de la Fundación dio el sermón principal en preparación para la Fiesta de los Tabernáculos.
Al día siguiente, 97 personas de seis naciones diferentes (Argentina, Bolivia, Chile, México, Estados Unidos y Perú) viajaron a Cochabamba y se quedaron en el Centro de Convenciones Casa Campestre, a 11 kilómetros del centro de la ciudad.
Toda la fiesta fue enfocada en el futuro Reino de Dios y cómo estos días representan el milenio. Los hermanos tuvieron la oportunidad de recibir instrucción espiritual durante los ocho días y de compartir los unos con los otros en este hermoso lugar.
El sermón del presidente de la Iglesia, Jim Franks, con doblaje hecho por Saúl Langarica, pastor de Chile y Bolivia, fue bien recibido por los hermanos el primer día santo. Otros mensajes incluían el de la mañana del Último Gran Día, presentado por el director del área hispana, León Walker (en vivo por Internet de Lican Ray, Chile), acerca de la búsqueda de la paz; un video grabado desde Mendoza, Argentina, del Sr. Langarica el quinto día de la Fiesta (sobre la vida cristiana representada en analogías del granjero, un atleta, y un soldado). El mensaje de apertura fue dado por el Dr. Levy, quien enfatizó el poder de la risa y su importancia durante los días de la Fiesta. Otros mensajes incluyeron temas como los milagros en nuestras vidas, la fe que necesitamos tener en este camino, la paciencia y la fe de los santos, cómo ser un rey en el Reino de Dios, el ejemplo de Sama, hijo de Age, ararita, el plan de Dios; y cómo ser una luz en este mundo.
Las actividades abundaron durante los ocho días. Hubo diversión para todas las edades. La primera noche hubo una actividad de bienvenida para los visitantes, preparada por los miembros de Bolivia, que incluyó bailes bolivianos típicos e incluso una banda de mariachis. Los jóvenes tuvieron su fiesta y compartieron con nuevos y viejos amigos. También hubo una tarde de talentos, donde fue posible apreciar los diferentes talentos de los hermanos. Se realizó un tour por la ciudad donde fue posible conocer diferentes lugares de Cochabamba, incluyendo el Palacio Portales, el Centro Cultural Simón Patiño y el mercado local de Cochabamba. Para la familia, hubo un baile familiar; para los más pequeños, una fiesta de niños que incluyó juegos, comida y diferentes actividades; para las damas y la tercera edad se llevó a cabo una actividad combinada, en la cual compartieron una rica comida y buena conversación; ésta incluyó además un video producido previamente, que mostraba el trabajo hecho por las damas de la Iglesia de Dios en Bolivia, Argentina y Chile. Tuvimos también dos estudios bíblicos (uno para los jóvenes y otro para los miembros en general).
Para muchos hermanos, ésta era la primera vez en Bolivia. Todos los visitantes desean agradecer a los hermanos bolivianos quienes hicieron todo lo posible por hacer de esta Fiesta un gran éxito. Y por supuesto, todo el honor y la gloria es para nuestro Dios quien hizo posible esta maravillosa fiesta con gente igualmente maravillosa en un hermoso lugar.
—Por Manuel Iturra y Ralph Levy