¡Bienvenidos a casa después de la Fiesta de Tabernáculos! ¡Este fue un año excepcional! Aunque las condiciones mundiales se siguen deteriorando, el pueblo de Dios, según los informes que hemos recibido, estuvo en verdad brillando como luz en medio de “una generación maligna y perversa” (Filipenses 2:14-15).
Debido a los sucesos que ocurrieron en el Medio Oriente justo antes de la Fiesta, tuvimos que pensar seriamente si sería conveniente tener el lugar de Ammán, Jordania como uno de los sitios para celebrar la Fiesta. Estuvimos en contacto con el coordinador de la Fiesta en ese lugar, Cory Erickson, quien estaba en contacto con el Departamento de Estado de Estados Unidos y con otros en Jordania que estaban monitoreando continuamente la situación. Eventualmente decidimos que era seguro viajar allí; y para 61 personas, creo que fue el viaje más increíble de toda su vida. Todos regresaron a su hogar después de la Fiesta, bien, sin contratiempos.
Este año tuvimos un ligero aumento en la asistencia a la Fiesta, pero la distribución fue un poco diferente con respecto del año pasado. Casi la mitad de los asistentes estuvo en los Estados Unidos y la otra mitad en diferentes partes del mundo. Esto se debió en parte a que tuvimos cuatro sitios internacionales nuevos de Fiesta este año—Ammán, Jordania; St. Kitts, Fiji e Inglaterra. Creo que debido a estas opciones tuvimos un aumento considerable en el número de personas que celebró la Fiesta fuera de los Estados Unidos.
Las ofrendas de los días santos en los Estados Unidos también estuvieron muy bien (aunque varias personas viajaron a otros sitios fuera del país). Esperamos que cuando tengamos todas las cifras, el total sea ligeramente mayor que el del año pasado. Pero en lo que respecta a dos fiestas del otoño, el promedio por persona fue considerablemente mayor que en 2011.
Otro asunto relacionado con la Fiesta tiene que ver con el número de conexiones vía electrónica a los servicios, que hubo este año. El número fue bastante mayor que el que hemos visto en años anteriores. Creo que esto es un testimonio de que hay un número creciente de personas que no pueden viajar a la Fiesta por cuestiones financieras o físicas. Es importante encontrar la forma de servirles mejor, y estamos analizando varias posibilidades. Creo realmente que es totalmente inaceptable en esta época en la que vivimos, con toda la tecnología disponible, que un miembro no pueda ver o escuchar un sermón. Ya que una parte muy importante de nuestra responsabilidad es cuidar de los miembros, necesitamos encontrar la manera de hacerlo de una forma más eficiente.
Espero que hayan tenido una Fiesta maravillosa. Aquí en la oficina, todos vinimos inspirados y listos para trabajar. Espero que estén haciendo planes para participar en las clases en línea del Instituto de la Fundación, que están programadas para comenzar en noviembre, y si usted es más joven, en los fines de semana de liderazgo para los jóvenes adultos, que también están programadas para el mismo mes. Dios ha sido muy generoso con nosotros y nunca debemos dar por sentado estas bendiciones. Si nosotros hacemos nuestra parte cada día (no esporádicamente), creo que continuaremos viendo un gran progreso en la obra de la Iglesia.