A una hora de la ciudad capital de Guatemala, en el departamento de Chimaltenango, bajo la dirección del ministro, el señor Eleodoro Ávila, se realizó el Campamento de jóvenes 2013, iniciando el viernes 6 de diciembre y despidiéndonos el miércoles 11, período durante el cual los 48 jóvenes de Guatemala (incluyendo dos señoritas de San Salvador) disfrutaron de la amistad, compartiendo el ánimo, las sonrisas, los abrazos y algunos juegos deportivos con otros jóvenes, nutriendo sus cuerpos con una gran variedad de alimentos especiales (preparados con esmero y mucho cariño por nueve colaboradores dirigidos por la diaconisa Lilian Pérez).
De igual manera, nutrieron sus mentes con gran variedad de alimento espiritual, cuyo enfoque central fue dado el sábado por el señor Isaí Morales, con el tema de “No tomar decisiones equivocadas”, y el sermón del ministro Eleodoro Ávila acerca de “El noviazgo”.
Desde el comienzo, el viernes 6 de diciembre, y durante el resto de los días hábiles hubo estudios bíblicos, y varones y señoritas dieron mensajes como: “Comportamiento del joven cristiano”, “Para qué sirve la Biblia”, “La oración como parte de mi vida”, “Reglas de urbanidad para comer”. También, hubo clase de manualidades por la diaconisa, quien les enseñó cómo elaborar tarjetas.
Incansables, intuitivos, dóciles, colaboradores, imaginativos, creativos, inquietos y muchos adjetivos más son los que definen a nuestros jóvenes y jovencitas, cuya disposición al aprendizaje y la participación fueron dos puntos especiales que observamos a diario en cada uno de ellos.
La hora de “Tu Creador es primero”, una hora de comunicación directa con grupos más reducidos, nos ayuda a conocerlos más, doblamos rodillas para saber sobre qué hablar y cómo responder; qué importante es que estemos preparados para ello. Espiritualmente, tenemos que saber qué vamos a responder, pues las preguntas son de todo tipo, es una gran responsabilidad de nuestra parte. Oímos y observamos el desarrollo de su carácter, lo que han oído por años, lo que han leído de la Biblia y la forma como interactúan con sus familiares y demás miembros de la Iglesia, sus incertidumbres y anhelos, sus metas y perspectivas, los obstáculos que tendrán que librar, todo aplicado a la Escritura.
Una nueva modalidad para las porras fue requerida por nuestro diácono, el señor Gamaliel Galdámez, quien les sugirió que toda las letras irían en relación al himno de la alegría, lo que despertó la imaginación y las dotes compositoras de todos los camperos. El señor Galdámez aportó estudio y temas bíblicos importantes, uno de los cuales lo desarrolló con base en la actitud de “Dar gracias”.
La mejor campera, el mejor campero y la mascota del campamento fueron: la joven Karen Sique; el joven Kenneth Aldana; y el jovencito Fernando Castillo respectivamente.
Un ministro, una diaconisa, un diácono y siete colaboradores más fuimos encapsulados con estos 48 jóvenes y jovencitas, cada uno le pedimos mucho a nuestro gran Dios que saliera todo bien, agradecemos el programa realizado por nuestro pastor, el señor Luis Mundo y su esposa Dorita, por lo cual todo fue un éxito, agradecemos las oraciones de los padres de familia y demás miembros de la Iglesia a quienes invitamos a no permitir que sus hijos falten y se queden en casa.
Jóvenes: muchas gracias por su juventud, por su ejemplo y su ánimo. Nos motivan a seguir sirviéndoles. Lleven lo aprendido a sus hogares y pónganlo en práctica. ¡Ánimo y adelante!
—Milován Chicas