Queridos hermanos:
¡El tiempo se está acelerando! La primavera pasada se cumplieron 60 años desde que mi madre escuchó por primera vez a Herbert Armstrong en el radio, y con esto comenzaron varios eventos que cambiaron mi vida para siempre. ¿Se ha usted preguntado alguna vez lo que hubiera sido de su vida si usted nunca hubiera conocido la verdad?
He estado meditando en eso recientemente porque estaba sentado en mi escritorio, haciendo la planeación de los meses que vienen. Pareciera que en la oficina siempre estuviéramos planeando actividades para las próximas semanas y meses en el futuro. La próxima semana tendremos una reunión con todos los coordinadores de la Fiesta de Tabernáculos 2013, que está a un poco más de ocho meses a partir de ahora.
También tendremos otro fin de semana de liderazgo para jóvenes adultos en febrero, aquí en el área de Dallas y estaremos trasmitiéndola simultáneamente a tres lugares adicionales: Branson, Minneapolis/St. Paul y los Ángeles. Esperamos la participación de varios cientos de jóvenes adultos.
Poco tiempo después de la actividad de los jóvenes adultos, celebraremos los días santos de la primavera, que caen en marzo este año. Poco tiempo después, tendremos nuestra 2ª conferencia ministerial internacional, programada para junio en el área de Dallas. El año pasado fue un evento con tanto éxito que sentimos que deberíamos repetirlo en el 2013. Entre ahora y junio, estaremos lanzando nuevos programas en media, con el fin de tratar de llegar a este mundo agonizante con la maravillosa verdad del plan de Dios. Pronto estará listo nuestro nuevo estudio y podremos hacer allí todas nuestras producciones de video. También lanzaremos un programa de TV en Internet y varios folletos electrónicos.
Con tantas actividades futuras planeadas, es muy fácil pasar por alto lo que ha sucedido antes y nos ha traído hasta este punto en nuestra historia. Recientemente le comenté a alguien, que nunca había estado en la Iglesia buscando algo que hacer. ¡Siempre había estado muy ocupado! Recuerdo que cuando nuestros hijos eran pequeños les decía que en el verano iba a estar con más tiempo libre, pero nunca fue así. Luego, les decía que después de la Fiesta sí iba a hacer así, pero tampoco. Luego entonces les hablaba de que en el invierno sí iba a ser más fácil pero eso no pasaba. La lección que aprendí es que si usted quiere hacer algo con su familia es mejor que lo planee directamente en vez de esperar que tenga menos trabajo para planearlo, porque tal parece que esto es algo que nunca pasa.
Los últimos 60 años nunca han sido aburridos, pero cuando pienso en las cosas que han hecho la vida más interesante, me doy cuenta que son las personas que he conocido, con las que he reído, he llorado, compartido las comidas y llegado a amar con un amor más profundo que nunca pensé que fuera posible. Al reflexionar en el pasado con esta perspectiva siempre me trae recuerdos muy especiales.
¿Qué nos traerá el futuro? Si el pasado pudiera darnos una pista, habrá más personas para conocer, más personas para amar y más aventuras por delante. Si bien el mundo está al borde de una calamidad global como nunca antes ha habido en la historia (Mateo 24:21), pronto veremos un maravilloso futuro más allá de la tristeza. Confío en que Dios nos va a dirigir y a proteger si nos mantenemos cerca de Él. Hay más capítulos para escribir y más trabajo por hacer. David escribió en el salmo 143:5: “Me acordé de los días antiguos, meditaba en todas tus obras; reflexionaba en las obras de tus manos”. No quiero estar tan ocupado que no pueda reflexionar en el pasado y en los milagros que Dios ha hecho en tantas vidas. Nuestro llamamiento y elección son invaluables y nunca debemos darlos por sentado. No puedo imaginar mi vida sin el conocimiento de la verdad de Dios. Espero que ustedes sientan los mismo.
No quisiera despedirme de ustedes sin agradecerles por toda su generosidad durante el año fiscal pasado. Nuestros ingresos en el 2012 fueron mucho mayores de lo que anticipamos cuando hicimos el presupuesto hace más de un año, y el mes de diciembre terminó justo con un récord de donaciones. No tengo ningún deseo de hacer demasiado énfasis en el dinero cuando les escribo a todos ustedes, pero quisiera expresar mi sincera gratitud con todos por su generosidad y respaldo. Por supuesto, siempre debemos darle gracias a Dios nuestro Padre quien hace posible todas las cosas.
Voy a terminar con un par de versículos de la 2ª epístola de Pablo a los Corintios: “Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento. Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden” (2 Corintios 2:14-15).
Realmente tenemos muchas cosas por las que debemos estar agradecidos. Recordemos, como dijo Pablo, “que Dios no lleva siempre en triunfo” y “que por medio de nosotros”, la verdad de Dios, como si fuera un olor, será manifiesta en todo lugar. ¡El milagro comenzó el día en que usted fue llamado! ¡Nunca estemos tan ocupados planeando para el futuro que no podamos tomar el tiempo necesario para agradecer a Dios por los milagros que Él ha realizado en nuestra vida!
Sinceramente, su hermano en Cristo
Jim Franks