Queridos hermanos:
¡El verano ya llegó a Dallas! Regularmente la temperatura está por encima de los 38°C. Esto ha traído algunos problemas en el sitio de construcción de nuestra nueva oficina. Todavía estamos vaciando concreto, lo cual debemos terminar antes de empezar la estructura de acero. Con temperaturas por encima de los 38°C en el día, desearíamos poder hacerlo por la noche, cuando la temperatura baja hasta los 26 °C. Sin embargo, la ciudad de McKinney no nos permite hacerlo por las residencias que hay alrededor.
Trabajar con semejantes temperaturas por encima de los 38 grados es difícil, y hace que el trabajo se vea limitado a las horas matutinas en vez de la tarde, lo que causa un poco de retraso. Por supuesto, todos entendemos que estas cosas suceden cuando uno está construyendo. Las cosas dependen de las reglas de la ciudad, el clima, los programas de trabajo y los materiales. Estamos muy entusiasmados y con muchas expectativas de ver terminada la construcción y poder trasladarnos allí. En resumen, estamos cumpliendo lo programado (teniendo en cuenta que comenzamos dos meses después), pero probablemente perderemos un poco de tiempo debido al calor tan extremo.
Éste no es el primer proyecto de construcción en el que he participado, pero tengo que admitir que estoy aprendiendo nuevas lecciones en este proceso. Las buenas noticias son que hemos sido bendecidos este año con un ingreso adicional por encima de lo presupuestado, lo que nos ha permitido manejar los costos imprevistos. Pareciera que cada vez que ha surgido algo nuevo, el dinero necesario ha estado disponible. Estoy muy contento de poder decir que la compra del terreno y la construcción del nuevo edificio no nos han distraído de nuestros esfuerzos por predicar el evangelio y cuidar de los hermanos.
Una muestra de ello es que desde julio del 2017 hemos contratado seis nuevos ministros de tiempo completo en los Estados Unidos. Además de estos seis, estamos cerca de anunciar un nuevo empleado para la producción de videos. Para finales del verano esperamos tener esta vacante llena.
Éste es el mayor número de contrataciones que hemos tenido en un período de doce meses, desde que comenzó la Iglesia de Dios, una Asociación Mundial. En el caso del ministerio siempre hemos deseado contratar hombres más jóvenes para reemplazar los que se retiran, así que nos sentimos satisfechos de que dos de los que acabamos de emplear estén apenas comenzando sus treinta años de edad.
Los seis nuevos empleados son: Chad Messerly (empleado en julio del 2017), en Columbus, Ohio; Zach Smith (empleado en noviembre del 2017) en Akron, Ohio; Caleb Froedge (empleado el 2 julio del 2018), en el área de Kansas City; Larry Solomon (empleado el 2 julio) en Buford, Georgia; y David Jackson (empleado de medio tiempo a tiempo completo a partir del 16 de julio), en Maryland.
David Jackson ha tomado el puesto de pastor, al reemplazar a Tim Waddle, que fue transferido el último año a Nueva Zelanda. Tenemos la expectativa de que los cinco restantes podrán asumir la responsabilidad de pastorear las congregaciones en el futuro cercano.
En los últimos doce meses, la Iglesia de Dios, una Asociación Mundial, ha centrado su atención en la advertencia de Cristo: “A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies” (Mateo 9:37-38). Creemos que ustedes también lo tienen presente. Como resultado de estas oraciones, vemos que hay nuevos hombres que han sido añadidos al ministerio de tiempo completo para que vayan a “su mies”. Sí, creemos que la cosecha le pertenece a Dios. Él es quien debe llamar a todos y cada uno (Juan 6:44). Nuestra labor es hacer que el mensaje del evangelio esté disponible para tantas personas como sea posible, y luego es la labor de Dios llamar a quien Él escoja. Y después de esto, tenemos la responsabilidad de proveer los pastores para que cuiden de esos que están siendo llamados. Hemos sido llamados a hacer una parte importante.
Además de estas seis nuevas contrataciones ministeriales en los Estados Unidos, estamos enfocando nuestra atención en el Programa de liderazgo internacional para proveer la ayuda tan necesaria para los ministros y el liderazgo en áreas fuera de Estados Unidos. Este nuevo programa está cobrando fuerza e incluirá seminarios y clases en cada región del mundo antes del fin del 2019. Tenemos un fin de semana más programado para este año (después de la Fiesta de Tabernáculos) en Filipinas. Incluirá a los líderes y líderes potenciales tanto de Asia como de Filipinas.
La obra de la Iglesia nunca se desacelera, ni siquiera en la época de verano. Con la nueva construcción, dos sesiones de una semana de clases de educación continuada del IF, la incorporación de los nuevos empleados, este verano será más ocupado que la mayoría. Me recuerdo constantemente que en medio de todas estas ocupaciones, no debemos descuidar lo más importante de nuestra vida —nuestra relación personal con Dios.
Como cristianos, tenemos la oportunidad cada séptimo día, en el sábado, de tomar un descanso en nuestra rutina semanal para poder tener una renovación espiritual. No vamos a trabajar, no buscamos nuestro placer personal. En lugar de eso, vamos a los servicios y descansamos. “Seis días trabajarás, y al séptimo día reposarás, para que descanse tu buey y tu asno, y tome refrigerio el hijo de tu sierva, y el extranjero” (Éxodo 23:12). Vemos que aún Dios “Cesó y reposó” en el sábado: “Señal es para siempre entre mí y los hijos de Israel; porque en seis días hizo el Eterno los cielos y la tierra y en el séptimo día cesó y reposó” (Éxodo 31:17).
Estoy contento por aquellos que puedan tomar un tiempo durante el verano para alejarse de toda la presión que constantemente enfrentamos en la sociedad. Yo sé que en otras partes del mundo no ocurre lo mismo que en Estados Unidos. Pero al viajar por África y Latinoamérica, he visto que los altos niveles de estrés y actividad constante se han vuelto parte de nuestra sociedad moderna virtualmente en todas las naciones. Pareciera que todos necesitáramos un descanso, un tiempo para relajarnos. Todos necesitamos un momento en el que podamos rejuvenecernos física y espiritualmente.
Por favor disfruten el verano. Si les es posible tomen un tiempo para salir, pero nunca se descuiden en cuanto a su crecimiento espiritual. El apóstol Pablo les advirtió a los efesios y colosenses que fueran diligentes y redimieran el tiempo (Efesios 5:16; Colosenses 4:5). La oración, la meditación y el estudio son actividades esenciales para todo cristiano y ¡son tan importantes en el verano y en las vacaciones como lo son durante el resto del año!
Sinceramente, su hermano en Cristo
Jim Franks