Pregunta: Mi pregunta está relacionada con el bautismo. ¿Qué puede sugerirle a una persona que no es miembro de la Iglesia (debido al lugar en que está o a la decisión de no asociarse con la Iglesia local porque las doctrinas que enseñan no están basadas en la Biblia), ya sea intencionalmente o sin intención de su parte? ¿Es algo inaudito el bautismo por uno mismo, tal vez invocando la directa autoridad de las manos del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo con autoinmersión, sin que intervengan las manos de otro ser humano?
Respuesta: No existe ningún ejemplo del autobautismo en la Biblia. Pero usted está por el camino correcto al pensar en términos del bautismo e imposición de manos. Tenga en cuenta que aun en el primer siglo, cuando las congregaciones en la Iglesia aún no habían sido establecidas en muchas naciones, Dios envió ministros para que enseñaran, bautizaran e impusieran sus manos sobre aquellos que Él estaba llamando. Él no permitió que los nuevos conversos se bautizaran a sí mismos.
Me gustaría comentar más acerca de la oración del ministro de Dios mientras impone sus manos en el recién bautizado. No es una simple formalidad. Si usted no lo ha hecho aún, lo animo a que lea el artículo “La imposición de manos” y analice los ejemplos de las escrituras que encontramos allí. Explica claramente que Dios escoge dar el don del Espíritu Santo a través de la imposición de manos de un ministro de Él en el bautismo.
Le recomiendo que analice cómo todo encaja con el proceso de conversión, leyendo nuestro folleto ¡Cambie su vida! Cada parte —arrepentimiento, bautismo, la imposición de manos y la práctica continua de la fe— es esencial para el todo.
Pablo escribió acerca de la decisión de Dios de trabajar por medio de sus ministros para traer a otros a la conversión: “¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quién les predique?” (Romanos 10:14). Aunque la Biblia (y muchos recursos para el estudio de la Biblia) están disponibles ampliamente en la actualidad, la interacción personal con un ministro todavía es necesaria. Puede ser de gran ayuda para la persona que busca el bautismo, ayudándole en el proceso del arrepentimiento.
Jesús prometió que su Iglesia nunca moriría —que estaría siempre presente en esta Tierra hasta su regreso. En esta promesa está implícita la existencia de ministros y otros ayudantes en la Iglesia. Vea Mateo 16:18 y nuestro folleto: ¿Dónde está la Iglesia que Jesucristo edificó? El capítulo final habla acerca de cómo encontrar la Iglesia de Jesús en la actualidad. Veamos un extracto:
“La Iglesia de Dios, una Asociación Mundial, editora de este folleto, es una continuación de la Iglesia que Jesucristo fundó. Creemos y enseñamos las mismas doctrinas que Jesús le dio a su Iglesia en el primer siglo, y nos esforzamos por vivir según todas las leyes de Dios. También estamos comprometidos con la comisión que Cristo le dio a su Iglesia: hacer discípulos alrededor del mundo y enseñarles a obedecer las enseñanzas de Jesús (Mateo 28:19-20)”.
Usted puede aprender más de nosotros, haciendo un clic en “Quiénes somos”, o en VidaEsperanzayVerdad.org. Y puede localizar a nuestro pastor que sirve en su área haciendo un clic en “Encuentre una congregación cercana”. CA